Agrandamiento de la próstata: descripción general del tratamiento

El agrandamiento de la próstata, también conocido como hiperplasia prostática benigna (HPB), es una afección frecuente que afecta a los hombres, especialmente a medida que envejecen. A nivel mundial, hubo 94 millones de casos de HPB en 2019, casi el doble del número de casos que se registraron en el año 2000. Vivir con agrandamiento de la próstata puede ser difícil, ya que a menudo causa síntomas urinarios incómodos, como flujo urinario débil, micción frecuente y problemas para vaciar completamente la vejiga.

Los síntomas del agrandamiento de la próstata pueden alterar la vida diaria e incluso pueden provocar complicaciones más graves si no se tratan. Un profesional de atención médica puede diagnosticar la HPB con un examen físico y análisis de laboratorio, como análisis de sangre o estudios de diagnóstico por imágenes. Hay varias opciones de tratamiento disponibles para controlar los síntomas del agrandamiento de la próstata. Estas opciones pueden incluir medicamentos, como alfabloqueantes e inhibidores de la 5-alfa reductasa, procedimientos mínimamente invasivos y cirugías.

Opciones de tratamiento del agrandamiento de la próstata

La elección del tratamiento depende de la gravedad de los síntomas, la salud general del paciente y sus preferencias personales. Por lo general, los medicamentos se utilizan como opción de primera línea para mejorar el flujo urinario, reducir las molestias y aliviar otros síntomas. En casos más graves o cuando otros tratamientos han fracasado, es posible que sea necesaria una cirugía. Puede ser útil considerar todas las opciones de tratamiento y analizarlas con un profesional de atención médica para tomar las mejores medidas.

Medicamentos

A la hora de tratar el agrandamiento de la próstata, hay varios medicamentos disponibles que pueden ayudar a controlar la afección. Los alfabloqueantes y los inhibidores de la 5-alfa reductasa son dos clases frecuentes de medicamentos utilizados para tratar el agrandamiento de la próstata. Los alfabloqueantes son un tipo de medicamento que ayuda a relajar los músculos de la próstata y el cuello de la vejiga, lo que facilita la micción. Algunos alfabloqueantes frecuentes utilizados para tratar el agrandamiento de la próstata incluyen los siguientes:

• Tamsulosina (Flomax®)
• Terazosina (Hytrin®)
• Doxazosina (Cardura®)
• Silodosina (Rapaflo®)
• Alfuzosina (Uroxatral®)

Estos medicamentos pueden aliviar los síntomas en un período relativamente breve, a menudo en unos pocos días o semanas. Sin embargo, no reducen el tamaño de la próstata y ocasionalmente pueden causar efectos secundarios como mareos, dolor de cabeza y presión arterial baja.

Los inhibidores de la 5-alfa reductasa actúan reduciendo la glándula prostática, lo que, con el tiempo, puede ayudar a mejorar el flujo urinario y reducir los síntomas del agrandamiento de la próstata. Dos inhibidores frecuentes de la 5-alfa reductasa son los siguientes:

• Finasterida (Proscar®)
• Dutasterida (Avodart®)

Por lo general, estos medicamentos son más eficaces para los hombres con próstatas más grandes y es posible que tarden varios meses en notar una mejora significativa de los síntomas. Los posibles efectos secundarios incluyen una disminución de la libido, disfunción eréctil y un volumen reducido de eyaculación.

En algunos casos, se puede recomendar una combinación de alfabloqueantes e inhibidores de la 5-alfa reductasa para proporcionar un tratamiento más eficaz. Además de los medicamentos, los cambios en el estilo de vida, como evitar beber agua u otras bebidas justo antes de acostarse, evitar la cafeína y el alcohol y ejercitar el suelo pélvico, también pueden ayudar a aliviar los síntomas del agrandamiento de la próstata.

Procedimientos mínimamente invasivos

Los procedimientos mínimamente invasivos pueden proporcionar alivio a la vez que causan menos complicaciones y requieren un tiempo de recuperación más breve que la cirugía tradicional. A menudo constituyen la opción preferida de aquellos que desean evitar posibles problemas eréctiles o eyaculatorios. Sin embargo, es posible que no proporcionen un alivio permanente, lo que puede requerir intervenciones futuras. Estos procedimientos incluyen los siguientes:

Terapia térmica con vapor de agua: este tratamiento utiliza vapor para extraer el exceso de tejido prostático con anestesia mínima o analgésicos necesarios. A menudo se puede hacer en un consultorio.

Termoterapia transuretral con microondas (TTUM): al igual que la terapia térmica con vapor de agua, la termoterapia transuretral con microondas utiliza calor para extraer el tejido prostático. Un pequeño instrumento llamado antena se introduce a través de la uretra y libera energía térmica (microondas) para eliminar el exceso de tejido prostático que obstruye el flujo urinario.

Elevación de la uretra prostática: durante este procedimiento, el proveedor de atención médica inserta un dispositivo en la uretra para aumentar el tamaño de la abertura uretral. El objetivo es reducir la obstrucción del flujo urinario mediante la colocación de uno o más implantes diminutos para mantener la abertura uretral.

Tenga en cuenta que cada procedimiento tiene su propio conjunto de posibles beneficios y riesgos. Consulte a un profesional de atención médica calificado para determinar la opción de tratamiento más adecuada.

Otros procedimientos

Hay otras opciones de procedimientos disponibles para los hombres que presentan problemas urinarios debido al agrandamiento de la próstata. Varios procedimientos pueden ayudar a aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida general. Los siguientes son algunos procedimientos frecuentes para tratar el agrandamiento de la próstata:

• Resección transuretral de la próstata (RTUP): es una cirugía frecuente para tratar los problemas urinarios causados por el agrandamiento de la próstata. Se introduce un resectoscopio, que es un instrumento especializado, a través de la punta del pene hasta la uretra. El tejido prostático se extrae cuidadosamente para ayudar a restaurar el flujo urinario regular.

• Incisión transuretral de la próstata (ITUP): es una opción menos invasiva en comparación con la RTUP. Durante este procedimiento, se realizan pequeñas incisiones en la próstata, lo que puede ayudar a reducir la obstrucción urinaria sin extraer una cantidad significativa de tejido prostático. La ITUP puede recomendarse para hombres con próstatas más pequeñas o aquellos que no son candidatos para otras cirugías.

• Prostatectomía simple abierta: en los casos en los que hay un agrandamiento significativo de la próstata, puede realizarse una prostatectomía simple abierta. Esta cirugía implica realizar una incisión en la parte inferior del abdomen para extraer una parte de la próstata. Por lo general, se reserva para pacientes con agrandamiento grave de la próstata o cuando otras opciones de tratamiento no han proporcionado un alivio suficiente.

• Cirugía láser: la cirugía láser de próstata puede aliviar los síntomas urinarios de moderados a graves. Durante esta cirugía, se inserta un endoscopio a través de la punta del pene hasta la uretra. Luego se utiliza un láser para extraer el tejido prostático. Un ejemplo de este tipo de cirugía es la enucleación de la próstata con láser de holmio (holmium laser enucleation of the prostate, HoLEP).

• Vaporización plasmática: también conocido como procedimiento de botón, la vaporización plasmática implica el uso de una sonda especial para extraer el tejido prostático situado entre dos electrodos. Es comparable al método RTUP estándar.

Cada opción quirúrgica tiene sus beneficios y riesgos, y la elección del procedimiento dependerá del historial médico de la persona, la gravedad de los síntomas y la salud general.

Consulte a un profesional de atención médica

Solicite el asesoramiento de un profesional de atención médica cuando considere opciones de tratamiento del agrandamiento de la próstata. Dicho profesional puede evaluar los síntomas, el historial médico y los posibles factores de riesgo. Posteriormente, este puede describir los beneficios y los posibles inconvenientes de los diferentes tratamientos. Además de seleccionar el tratamiento adecuado, un profesional de atención médica puede determinar las dosis de medicación correctas y hablar sobre los posibles efectos secundarios, las interacciones, advertencias y precauciones.

Fuentes: https://www.auanet.org/guidelines-and-quality/guidelines/benign-prostatic-hyperplasia-(bph)-guideline https://www.uptodate.com/contents/benign-prostatic-hyperplasia-bph-beyond-the-basics#H10