Puede causar náuseas, vómitos, pérdida de apetito, estreñimiento, sabor desagradable en la boca, boca seca, llagas en la boca, mareos, dolor de cabeza o dificultad para dormir. En raras ocasiones, las náuseas y los vómitos pueden ser graves. Tomar este medicamento a la hora de acostarse puede ayudar a reducir las náuseas. En ciertos casos, es posible que el médico recete un medicamento para prevenir o disminuir las náuseas y los vómitos. Comer varias comidas pequeñas o limitar sus actividades podría ayudar a disminuir las náuseas y los vómitos. Informe lo antes posible a su médico o farmacéutico si cualquiera de estos efectos persiste o empeora.
Las personas que utilizan este medicamento pueden presentar efectos secundarios graves. Sin embargo, su médico le ha recetado este medicamento porque ha determinado que el beneficio para usted es mayor que el riesgo de sufrir los efectos secundarios. La supervisión estricta de su médico puede reducir este riesgo.
Este medicamento podría aumentarle la presión arterial y la frecuencia cardíaca. Ocasionalmente estos efectos pueden ser graves. Revise regularmente su presión arterial y frecuencia cardíaca e informe a su médico si obtiene resultados altos. Es posible que su médico controle su presión arterial y frecuencia cardíaca con medicamentos.
Informe inmediatamente a su médico si presenta cualquier efecto secundario grave, incluyendo: signos de problemas renales (por ejemplo, cambios en el volumen de orina).
Este medicamento reduce la función de la médula ósea, lo cual es un efecto que puede resultar en recuentos bajos de células sanguíneas tales como glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas. Este efecto puede producir anemia, disminuir la capacidad de su organismo para combatir infecciones o causar la fácil aparición de moretones/sangrado. En raras ocasiones, este medicamento también puede causar ciertos cánceres de la médula ósea o de las células sanguíneas. Su médico supervisará sus recuentos de glóbulos sanguíneos. Notifique a su médico inmediatamente si presenta cualquiera de los siguientes síntomas: signos de anemia (por ejemplo, cansancio inusual, piel pálida, falta de aliento, ritmo cardíaco acelerado), signos de infección (por ejemplo, dolor de garganta persistente, fiebre, escalofríos), fácil aparición de moretones/sangrado (por ejemplo, orina rosada/con sangre, heces negras/con sangre), debilidad, pérdida de peso.
En raras ocasiones, el niraparib puede causar una afección conocida como PRES (síndrome de leucoencefalopatía posterior reversible). Busque atención médica de inmediato si presenta dolor de cabeza persistente, convulsiones, cambios repentinos en la vista, cambios mentales/anímicos (por ejemplo, confusión)
Rara vez ocurre una reacción alérgica muy grave a este medicamento. Sin embargo, busque atención médica de urgencia si nota cualquier síntoma de una reacción alérgica grave, incluyendo: erupción cutánea, picazón/inflamación (especialmente en la cara/lengua/garganta), mareos intensos, dificultad para respirar.
Esta no es una lista completa de los posibles efectos secundarios. Comuníquese con su médico o farmacéutico si nota otros efectos no mencionados anteriormente.
En los Estados Unidos -
Llame a su médico para consultarlo acerca de los efectos secundarios. Puede reportar efectos secundarios a la FDA al 1-800-FDA-1088 o en MedWatch: The FDA Safety Information and Adverse Event Reporting Program.
En Canadá - Llame a su médico para consultarlo acerca de los efectos secundarios. Puede reportar efectos secundarios a Salud Canadá (Health Canada) al 1-866-234-2345.