Libervant

No comparta este medicamento con nadie. La ley prohíbe compartirlo.

No aplica.

Guarde este producto en su envase de aluminio, a temperatura ambiente, protegido de la luz y la humedad. No lo guarde en el cuarto de baño. Mantenga todos los medicamentos fuera del alcance de los niños y las mascotas.

No deseche medicamentos en el inodoro ni en el desagüe, a menos que se lo indiquen. Deseche apropiadamente este producto cuando se cumpla la fecha de caducidad o cuando ya no lo necesite. Consulte al farmacéutico o a su compañía local de eliminación de desechos para obtener más información.

Si se presenta una emergencia médica, la afección de su hijo puede causarle complicaciones. Para obtener información sobre la suscripción a MedicAlert, llame al 1-888-633-4298 (EE.UU.) o al 1-800-668-1507 (Canadá).

El diazepam supone un riesgo de uso excesivo y adicción, lo cual puede llevar a una sobredosis y la muerte. Usar este medicamento junto con alcohol o con otros medicamentos que pueden causar somnolencia o problemas respiratorios (en particular con medicamentos opioides como codeína, hidrocodona) podría causar efectos secundarios muy graves, incluso la muerte. Para reducir el riesgo de su hijo, el médico deberá indicarle que use la dosis mas baja de diazepam que sea eficaz durante el menor tiempo posible. Asegúrese de saber cómo usar el diazepam y qué otros fármacos debe evitar cuando lo use. Consulte también la sección de Interacciones con otros medicamentos. Busque atención médica de urgencia si su hijo presenta cualquiera de los siguientes efectos secundarios muy graves: respiración lenta/superficial, aturdimiento inusual, somnolencia/mareos intensos, dificultades para despertarse.

Este medicamento no debe usarse regularmente. Si su hijo usa este medicamento de forma regular, suspender el uso de este medicamento de forma repentina puede causar síntomas graves (potencialmente mortales) de abstinencia, especialmente si lo usa regularmente durante un período prolongado o en dosis altas. Para prevenir los síntomas de abstinencia, es posible que el médico disminuya la dosis lentamente. Informe inmediatamente a su médico o farmacéutico si su hijo presenta síntomas de abstinencia como dolores de cabeza, dificultades para dormir, inquietud, alucinaciones/confusión, depresión, náuseas o convulsiones que no se detienen. Los síntomas de abstinencia pueden durar semanas, o incluso meses.

Consulte también la sección de Advertencia.

Lea la Guía del medicamento y las Instrucciones de uso que el farmacéutico le facilita, antes de empezar a usar el diazepam y cada vez que renueve su receta. Asegúrese de tener a la mano este medicamento por si lo llega a necesitar. Aprenda anticipadamente cómo usar correctamente este medicamento. Los cuidadores deberán aprender cuándo debe usarse este medicamento y qué síntomas podrían ser preocupantes después de usarlo. Si tiene alguna duda, consulte al médico o farmacéutico.

Este medicamento se administra por vía oral, con o sin alimentos, según las indicaciones del médico. No lo administre con ningún líquido. La dosificación dependerá del peso de su hijo y de su respuesta al tratamiento.

Saque la hoja de diazepam de la envoltura de aluminio sólo cuando esté listo para usarlo. No corte la hoja. Asegúrese de tener las manos limpias y secas antes de tocar la hoja. Con una mano, abra bien grande la boca del niño. Con la otra mano, coloque la hoja en plano en cualquier lado interior de la mejilla. No frote la hoja para que se disuelva en la mejilla. No coloque la hoja en los dientes. Después de esto la hoja debería permanecer en su lugar por sí sola. Déjela en el mismo sitio hasta que se disuelva. La hoja no se debe masticar ni tragar entera. Si su hijo escupe o eyecta la hoja inmediatamente después de colocarla, puede ponerle otra nueva.

Es posible que en algunos casos se recete una segunda dosis y se la administre al menos 4 horas después de la primera dosis. No use más de 2 dosis para tratar un episodio de convulsiones en serie.

No use este producto más de una vez cada 5 días o más de 5 veces en un mes. Hacerlo podría hacer que el medicamento deje de ser eficaz. Es posible que empeoren las crisis convulsivas de su hijo o que sucedan con más frecuencia. Hable con el médico si el medicamento pierde eficacia.

Aunque este medicamento ayuda a muchas personas, en ocasiones puede causar adicción. El riesgo podría ser mayor si su hijo tiene un trastorno de adicción (por ejemplo, consumo excesivo de fármacos/drogas/alcohol o adicción a dichas sustancias). Use este medicamento exactamente como se lo recetaron para reducir el riesgo de adicción. Pida a su médico o farmacéutico más información.

Busque atención médica de urgencia si las crisis convulsivas de su hijo no ceden o no mejoran después de usar este producto según las indicaciones, si no puede administrar el medicamento o si su hijo presenta cambios alarmantes en la respiración, la coloración, el comportamiento o la afección.

Consulte también la sección de Advertencia.

Puede causar somnolencia o dolor de cabeza. Informe lo antes posible al médico o farmacéutico si cualquiera de estos efectos persiste o empeora.

Recuerde que el médico ha recetado este medicamento porque ha determinado que el beneficio para su hijo es mayor que el riesgo de sufrir los efectos secundarios. Mucha gente que usa este medicamento no presenta efectos secundarios graves.

Informe inmediatamente a su médico si su hijo presenta cualquier efecto secundario grave, incluyendo: movimientos incontrolables (por ejemplo, temblores).

Busque atención médica de urgencia si su hijo presenta cualquier efecto secundario muy grave, incluyendo: respiración lenta/superficial, somnolencia inusual/dificultad para despertarse.

Un grupo pequeño de personas que toman anticonvulsivos para cualquier afección (por ejemplo, convulsiones, trastorno bipolar, dolor), puede presentar problemas de depresión, pensamientos/intentos suicidas u otros problemas mentales/anímicos. Informe inmediatamente al médico si nota en su hijo cualquier cambio inusual/repentino en el estado de ánimo, en los pensamientos o en el comportamiento, como señales de depresión, pensamientos/intentos suicidas, deseos de querer hacerse daño.

Rara vez ocurre una reacción alérgica muy grave a este medicamento. Sin embargo, busque atención médica de urgencia si nota cualquier síntoma de una reacción alérgica grave, incluyendo: erupción cutánea, picazón/inflamación (especialmente en la cara/lengua/garganta), mareos intensos, dificultad para respirar.

Esta no es una lista completa de los posibles efectos secundarios. Comuníquese con su médico o farmacéutico si se producen otros efectos no mencionados anteriormente.

En los Estados Unidos -

Llame al médico para consultarlo acerca de los efectos secundarios. Puede reportar efectos secundarios a la FDA al 1-800-FDA-1088 o en www.fda.gov/safety/medwatch-fda-safety-information-and-adverse-event-reporting-program.

En Canadá - Llame al médico para consultarlo acerca de los efectos secundarios. Puede reportar efectos secundarios a Salud Canadá (Health Canada) al 1-866-234-2345.

Antes de usar diazepam, informe a su médico o farmacéutico si es alérgico a este medicamento, a otras benzodiazepinas (por ejemplo, lorazepam), o si padece de cualquier otra alergia. Este producto podría contener ingredientes inactivos que pueden causar reacciones alérgicas u otros problemas. Consulte a su farmacéutico para obtener más información.

Antes de usar este medicamento, informe al médico o farmacéutico sobre el historial médico del niño, especialmente antecedentes de: glaucoma, problemas respiratorios (por ejemplo, enfermedad pulmonar obstructiva crónica, o EPOC, asma), trastornos mentales/anímicos (por ejemplo, depresión, pensamientos suicidas, psicosis).

Este medicamento puede causar mareos o somnolencia en su hijo. No deje que se monte en una bicicleta, maneje, use maquinaria ni lleve a cabo ninguna actividad que requiera estar alerta, hasta estar seguro de que su hijo pueda realizar estas actividades sin peligro.

Antes de someter a su hijo a una cirugía, informe al médico o dentista de todos los productos que usa (incluidos los medicamentos con o sin receta y los productos herbales).

Generalmente, los adultos no usan este medicamento. Es poco probable que se administre durante el embarazo o la lactancia. Si tiene alguna pregunta acerca de este medicamento, consulte al médico.

Consulte también la sección de Advertencia.

Las interacciones medicamentosas pueden cambiar la acción de los medicamentos de su hijo o aumentar su riesgo de sufrir efectos secundarios graves. Este documento no menciona todas las posibles interacciones entre medicamentos. Lleve consigo una lista de todos los productos que usa su hijo (incluidos los medicamentos con receta, sin receta y productos herbales) y compártala con el médico y farmacéutico. No empiece, suspenda ni cambie la dosificación de ningún medicamento sin la aprobación del médico.

Un producto que puede interactuar con este medicamento es: oxibato de sodio.

El riesgo de sufrir efectos secundarios graves (por ejemplo, respiración lenta/superficial, somnolencia/mareos intensos) puede aumentar si se usa este medicamento junto con otros productos que también pueden causar somnolencia o problemas respiratorios. Informe a su médico o farmacéutico si su hijo está usando otros productos como analgésicos o antitusivos opioides (por ejemplo, codeína, hidrocodona), alcohol, marihuana (cannabis), medicamentos para dormir o ansiolíticos (por ejemplo, alprazolam, lorazepam, zolpidem), relajantes musculares (por ejemplo, carisoprodol, ciclobenzaprina) o antihistamínicos (por ejemplo, cetirizina, difenhidramina).

Revise las etiquetas de todos los medicamentos de su hijo (por ejemplo, productos para las alergias o para la tos y el resfriado), porque podrían contener ingredientes que causan somnolencia. Consulte al farmacéutico acerca del uso prudente de estos productos.